La Málaga crucerística ya se ha colocado en el segundo lugar de nuestro país. Una nueva estación marítima de 8.440 metros cuadrados gestionará anualmente el paso de unos 560.000 pasajeros y renovará el turismo de la capital. La nueva terminal de cruceros del Puerto de Málaga está situada en el dique de Levante, y no será la única modificación en el perfil portuario, ya que se planea la construcción de un gran centro comercial y de ocio que amenizará la espera de los cruceristas y visitantes. Con este proyecto, Málaga ha entrado de lleno en el circuito mundial del turismo de cruceros y se ha convertido en puerto base de algunas importantes compañías como MSC y Vision. Las obras, con un presupuesto de 15,7 millones de euros, fueron adjudicadas a Necso -perteneciente a Acciona Infraestructuras- y han resultado en una superficie total de 8.438 metros cuadrados, repartidos entre los 5.422 de la planta baja, los 2.501 de la entreplanta y 515 más de las pasarelas de acceso a los barcos. Tiene capacidad para atender a unos 5.000 pasajeros de forma simultánea y comenzará a funcionar con los servicios de equipajes y mostradores, aunque el objetivo es implicar en su gestión a las más importantes navieras del mundo. La progresión desde ser un lugar de paso y escala -como era antes- o ser un puerto base de cruceros, es un gran salto adelante. Evidentemente se generaran más recursos económicos por la presencia continua de buques y el mayor flujo de viajeros. Ahora muchos cruceros comenzarán en Málaga con lo que los futuros cruceristas llegarán a nuestra ciudad en busca de estadias y resto de servicios mientras llega el momento del embarque. El turista que hace cruceros es un cliente de un nivel medio alto, en muchos casos extranjero, que llega a la ciudad de partida en avión, usa hoteles de alta gama y suele mantener un gasto medio diario más elevado que el turista regular... Si, el futuro inmediato de la industria turística en Málaga se muestra interesante... si sabemos aprovechar la ocasión y plantear una oferta competitiva.