Tantas veces los llamados entendidos… los buscadores de productos… tan perdidos están en busca de una imagen o un no sé que, que se quedan sin ver lo más obvio. Y a veces, es porque ellos no lo ven, que termina por no llegar a nuestras manos, habitantes a veces de lejanos países a los de aquel donde el artista en ciernes está intentando que alguien edite su disco… Algunos de estos entendidos alegan que esta música es demasiado comercial (no se si queriendo decir que, por ello, es de menor calidad, porque al fin es ‘lo comercial’ lo que vende y lo que la 'industria' llama producto)... Otros, incluso cuando el artista ya tiene éxito, no lo consideran porque ha sido banda sonora de alguna telenovela (único modo, en ocasiones, de hacerse conocer entre el gran público)…
los hay que nunca oirán su trabajo, porque ‘no les gusta’ o, simplemente, no tienen inquietud por la música, por la buena música (pero para gustarles tendrían que oir y ver que es lo que se les ofrece…) Hay discos que se pueden escuchar a todas horas, que son buenísimos y que nunca te cansan. Algunos tuvieron su momento, otros pasaron desapercibidos por la tienda de discos… pero siguen siendo obras de arte… aún sin haber llegado a ser importantes… así es el arte, ¿no?. Cada uno de ellos han llenado nuestros hogares de
talento y de sonidos inolvidables como fue el caso del primer trabajo de
Adriana Calcanhotto. La cantante de Porto Alegre, en el sur de Brasil, tuvo un largo camino para llegar… Al comienzo su trabajo rondaba ciertos entornos de Buenos Aires, pero el éxito aún parecía inalcanzable. Ahora viaja a Europa como si fuese al lado de casa… y España la adora, llenando cada concierto con el aval de sus ya nueve discos y de los grandes cantantes brasileños de los que sigue acompañándose. Ahora navega
por los mares del mundo, ofreciendo las canciones de su nuevo disco,
Maré… desde Abril en las tiendas y ahora en promoción con Worten Mobile para móbiles en todo Portugal… Maré es el segundo trabajo de una trilogía sobre el mar, que comenzó en
1998 con Maritmo y es justo uno de esos discos que no se pueden dejar de oir... una de esas joyas que no se han de dejar pasar...
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