Historias De Contrabandistas En Polperro
Es suficiente con un fin de semana largo para viajar a otro mundo, a un auténtico refugio de contrabandistas, convertido hoy en un apacible pueblo turístico y comercial, pero que conserva todo el misterio, el encanto y la belleza de sus orígenes. Protegido en una profunda cortadura de la roca, 6 millas al oeste de West Looe y unas 20 al sur del enlace ferroviario de Liskeard, Polperro es un bello hacinamiento de casas, que aprovecha todas las posibilidades de dicha cortadura alrededor de la cual yace un original puerto de pescadores. Los viejos contrabandistas que encontraron este refugio, y que protagonizaron incluso alguno de los más famosos episodios de la tenebrosa vida del bandido Dick Turpin, se han transformado, con el paso de las generaciones en comerciantes del hoy negocio de su pueblo, el turismo relacionado con el recuerdo de aquellos sus antepasados. Las cuevas, desde las que piratas y contrabandistas hacían señales nocturnas de hogueras, se han cubierto de pequeñas casas de marinero tipismo, pero en las que el visitante puede hallar todas las comodidades. Como en tantos rincones del mundo, los habitantes de este olvidado lugar, encontraron en su pasado antaño oscuro, un atrayente para el turismo que siempre espera una nueva sorpresa y una nueva historia que le sea contada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario