El futuro de la televisión en España

La chica de la tele dejaba esta pregunta hace unas horas: '¿Se pueden entender los programas de televisión fuera del entorno empresarial o de la parrilla en qué se emiten?' Como yo misma he comentado en otras ocasiones hablar de producto es no sólo hablar de su calidad individual, sino de su posicionamiento en la parrilla televisiva. Como la propia Susana afirma, 'es como un buen vino, que consumido con una hamburguesa del Burger King queda completamente deslucido, mientras que uno regularcito con unas buenas viandas puede sabernos a gloria. Retomando el tema televisivo, no podemos ver Dollhouse sin recordar que en EE.UU. ha sido relegada a la noche de los viernes, cementerio de programas en los que no se confía (...) En los tiempos televisivos que corren, piezas como Vientos de agua son de una calidad excelente, pero lamentablemente han ido a parar al olvido y a unos cuantas estanterías, pocas, menos de las que debiera.' Evidentemente casos como el último sufrió de no haber tenido el tiempo suficiente para que el público tomara cuenta de ella en en apenas unas emisiones fue relegada a un horario de madrugada y aún a cambios constantes en este. La televisión en abierto, en un tiempo como este. no puede permitirse maltratar superproducciones costosas y compras de los últimos éxitos del mercado mundial que al fin acaban perdidas en cualquier nicho de entre programas chicle (de los que se estiran o encogen según las necesidades del programador) y reposiciones varias... Entiendo la posición de Susana al concluir: 'Soy de la opinión de que en España pasará algo parecido con las televisiones en abierto (americanas), es decir, que se incrementará notablemente la presencia de programas en directo y poco costosos', sólo que entonces veremos que ocurre en un país como el nuestro en el que pocos estamos por la televisión de pago (que es la que suele emitir los contenidos de calidad)... yo, personalmente, apuesto por el streaming y creo que en un futuro más cercano de lo que creemos los aparatos de televisión en España tendrán, tanto incorporados como externos, sistemas que permitiran la visión de programas, en directo o ya emitidos, via internet, directamente a la pantalla sin tener que pasar por un ordenador... Caso que ya comenté con el innovador Vudú y que tiene ya muchos imitadores en el mercado estadounidense. Sólo la libertad que da la web, la variedad tanto gratuita como de pago, la posibilidad de alquilar peliculas mediante el sistema de download, podrán parar esta locura de programaciones y contraprogramaciones, de marear al televidente como ha estado ocurriendo una vez más esta semana con Hospital Central, y de creer que todo es posible en pos de negocio. En internet no hay fronteras, ni lenguas, y la publicidad no interrumpe ni condiciona, cohabita.