jueves, 30 de agosto de 2007

25 Años Sin Ingrid

A las 11.30 de la noche del 29 de agosto de 1982 para Ingrid Bergman se acababa una vida que había sido a la vez éxito en lo profesional y fracaso tras fracaso en lo personal... Pero Ingrid Bergman había nacido para actuar y poseía una capacidad interpretativa como pocas. Sin duda su personaje más recordado es Ilsa en Casablanca, que ha pasado a la historia como una de las mejores, si no la mejor, película del cine mundial. La actriz Ingrid Bergman nació el 29 de agosto de 1915 en Estocolmo (Suecia). Muy joven se inició en compañías de aficionados y más tarde se matriculó en la Real Escuela de Arte Dramático de su ciudad natal aunque abandona los estudios en 1935. Es entonces cuando participa en el film Munkbrogreven, con cuyo realizador protagonizó un año más tarde Intermezzo, la película que le dio a conocer internacionalmente. En 1939 Hollywood la esperaba con los brazos abiertos y en tan sólo cuatro años vino Casablanca y su éxito internacional. Dos años más y Luz de Gas... y de ahí un mito... En el 49 fué a Italia para protagonizar Stromboli , del director Roberto Rossellini, y comenzaron una relación que fué duramente criticada por la opinión pública de Estados Unidos e influyó negativamente en su imagen pública, ya que ambos estaban todavía casados. De esta etapa nos queda un cine más europeo, de mucha calidad, pero siempre más oscuro, más duro, y que en el fondo reflejaba todo lo que no era el glamour de Hollywood y que era también una muestra de lo que estaba viviendo la actriz, en una Europa aún levantándose tras la guerra, y con los Estados Unidos y su cine en contra por su vida con Roberto. Aunque la relación acabó, a Ingrid le quedaban sus tres hijos, de entre los cuales hoy conocemos el nombre de la justa heredera de la actriz, su hija Isabella Rossellini. Una carrera de cincuenta años en los cuales ganó tres Oscar, dos Emmy y un premio Tony. Murió en Londres victima del cáncer. Era el día de su cumpleaños... cumplió 67. No hubo nadie como ella y sus películas siguen siendo objeto de admiración en cualquier lugar donde haya un amante del buen cine.

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