Justo Es Lo Justo

Como comenté cuando se dieron a conocer las nuevas siete maravillas, el Cristo del Corcovado no es la gran obra que debiera para compartir el podium con el Taj Mahal o Petra, y para haber dejado en el camino a otras que le dan siete vueltas en calidad artística y en valia histórica... Sin embargo, no se puede obviar que es símbolo sin igual de Río y que su enclave lo convierte en la imagen que nunca se olvida y que nadie puede irse sin ver. El hecho de que desde cualquier parte de Río, tanto de día como de noche, se aprecie la estatua del Cristo hace que la tentación de conocerlo de cerca sea tan grande. El ascenso en tren es muy pintoresco y dura unos 15 minutos a través del Bosque Atlántico, una exuberante vegetación que a su vez sirve para escapar del intenso calor en los días de verano. La base del Cristo tiene una serie de plataformas de cemento a distintas alturas que culminan en los propios pies del monumento. Los ascensos entre plataformas son mediante escaleras, desde las cuales comienzan a percibirse los distintos puntos panorámicos de la ciudad.Al llegar a él, no es la estatua en sí la que captará nuestra atención, sino la vista que ofrece de la ciudad -especialmente de la zona sur -. En primer lugar se ve el sector sur de Río, con la Laguna Rodrigo de Freitas, las playas de Ipanema y Leblon, el Jardín Botánico, el Jockey Club y gran parte del Parque de Tijuca. Siguiendo el recorrido hacia el norte, aparecen Copacabana, Botafogo, Flamengo, la Bahía de Guanabara y el Pan de Azúcar. Desde el frente del Cristo, a unos 710 m. de altura, se observan el centro de Río, la Bahía de Guanabara y Niteori. Habitualmente hay una nube gris sobre estas zonas producto de la gran polución. Hacia el oeste aparecen el Estadio Maracaná y una parte del Parque Tijuca. Río de Janeiro suele centrar su turismo en playas y vida nocturna... Es una ciudad de contrastes, elegantes hoteles y caros restaurantes conviven con favelas y gente que vive en las calles. Su centro es ruidoso y muy concurrido durante los días laborales, pero también bastante inseguro... Los fines de semana brinda clama para visitar algunos lugares interesantes como el Monasterio de San Benito, el Museo de Bellas Artes, la Catedral y el Museo de la República en Catete. Para caminar nunca en la noche, y sólo por la Costera. Cada postal desde el Corcovado es arte... no hay lugar para retratar Río y entenderlo como este. Y Río vive mirando al Corcovado desde todas y cada una de sus perspectivas... Justo es decirlo y asegurar que este es uno de esos lugares a los que hay que ir, a donde hay que subir una vez en la vida... Para ver el mundo desde otro ángulo...