En estos tiempos en los que vamos y venimos, en los que hemos aprendido a apartar una parte de nuestro dinero para gastarlo en vacaciones... tenemos que distinguir entre los que sólo necesitan un descanso en algún lugar agradable y aquellos que buscan un poco más o incluso mucho más. Eso viene en la sangre... viene en lo que somos, en lo que nos mueve desde el mismo día en que nacimos. Para definirlo de algún modo, existe el turista y existe el viajero... Todo esto viene a lo ocurrido estos días en Yemen. Hoy, que muchos nos estamos doliendo junto con nuestos compatriotas catalanes y vascos, no quería dejar de hacerles un homenaje... cierto es que lo primero que pensé es que a mí no se me ocurriría viajar a un país en conflicto y que ahora estos países lo son aunque no haya una guerra en ellos. Pero también sé que Isabel, Gabriel, Marta, Maite, Antonio, Magie y Mikel... eran de esa gente que no se conformaba con poco... Viajero es quién necesita mirar al otro lado de la ventana de nuestro mundo, oler otros olores, hablar con otras gentes, entender este enorme puzzle que se llama planeta Tierra. Viajero es quién pasa meses con su dedo puesto en un mapa soñando caminos... desafortunadamente tenían casi un mes por delante y no llegaron a completar el cuarto día. Todo lo soñado quedo en un sueño. Un sueño disfrutado mientras lo soñaron. Quede este homenaje hoy por cada viajero que ama nuestro mundo y su gente. Quede este homenaje por estos siete viajeros que sólo tuvieron el tiempo de soñar.
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