Desierto De Tabernas

Hasta que no fue declarado paraje natural en el año 1989, el árido desierto de Tabernas era más apreciado como decorado para las películas del Far West que aquí rodaban que por sus valores naturales. El desierto, enmarcado entre las sierras de los Filabres y de la Alhamilla, en la provincia de Almería, está considerado un paraje singular en Europa por constituir la única zona desértica, propiamente dicha, que existe en todo el continente. Uno de sus mayores atractivos es el semblante cambiante que ofrece según la estación del año. Puede recorrerse a pie o en todoterreno, siguiendo las ramblas; otra opción es ir a caballo, emulando a los legendarios John Wayne y Clint Eastwood que rodaron películas en estos parajes. Al final, cuando creemos estar acostumbrados a la aridez, surge al pie de un cerro calcinado la pincelada blanca del pueblo de Tabernas, con su alcazaba árabe y la iglesia parroquial, en la que no hay que dejar de contemplar el bello artesonado mudéjar. Y como colofón de este circuito de cine podemos visitar el Mini Hollywood, al sur de Tabernas, que no es otro que el decorado de las películas en forma de pueblo del oeste y que fue convertido en un parque de atracciones que recrea un mundo lejano en tiempo y en espacio, el del nacimiento de los Estados Unidos.